Jabón de chumbera y ortigas

No sé si recordáis la entrada en la que os hablaba de las propiedades tanto de la ortiga, como de las palas de chumbera: "Un paseo por el campo..."
Bueno, pues enseño el jabón que hice con estos dos ingredientes.

Este jabón está indicado para pieles acneícas o grasas, .Como es un jabón un tanto atípico y nada usual, he querido probar el efecto en mi propia piel , aunque mi piel no es ni acneíca ni grasa, y he visto que para pieles mixtas también puede ir muy bien.En un principio te deja en la piel sensación de "demasiada limpieza", como tirante, pero en seguida desaparece esa sensación, se autoregula y la piel se queda con una buena hidratación. Ha resultado un jabón muy cremoso, y me ha sorprendido lo suave que queda la piel, no me esperaba esa suavidad.

Esto es lo que lleva:

Aceite de oliva
Aceite de coco
Infusión de ortiga
Pulpa de chumbera
Cúrcuma
Aceites esenciales de menta y de romero

La pulpa de la chumbera la he puesto, una parte junto con la infusión de ortiga (bien cargada) para mezclar con la sosa y otra parte la he añadido a la traza.
El color no era el que yo quería conseguir. En un principio tenía un precioso color verde, debido a la clorofila de la ortiga, con un contraste marrón (por eso he añadido la cúrcuma, para formar un marrón con el verde de la pulpa). Y así había quedado, verde con los círculos marrones...pero como el jabón tiene vida propia, o mejor dicho el elevado pH del principio hace estragos en algunos colores naturales, pues al final está como veis en las fotos. Aun así, sigue gustándome mucho cómo ha quedado.

Así estaba nada más sacarlo del molde, daba pena cortarlo:

Con ortigas ya había hecho más cosas, pero la pulpa de chumbera ha sido toda una revelación para mí, me ha encantado y sorprendido para bien! En cuanto pueda, formularé más cosas con ella.